
“Mi hijo, ese hombre” Autora: Sharon Olds (Estados Unidos, San Francisco, 1942). Traducción: Gaby Sambuccetti
De repente sus hombros se volvieron mucho más anchos
a la manera en la que Houdini estiraba su cuerpo
mientras otros le ponían cadenas.
Y parece como si
no hubiera pasado el tiempo desde que lo llevaba a su cuna,
tomando sus pantorrillas hacia su interior dorado,
tomándolo, levantándolo,
pesándolo.
Pero ahora apenas puedo imaginarme
que pronto ya no será más un niño,
y aunque sé que tengo que prepararme,
es decir, superar mi miedo a los hombres porque mi hijo se va a convertir en uno de ellos,
esto no era lo que me imaginaba cuando salió de mí con la presión de un cuerpo sellado que rompe hasta el hielo del Hudson,
parte el candado, deserpentea su encadenamiento,
y aparece en mis brazos.
Y ahora me está mirando
como Houdini miraba a su caja,
para aprender la clave de su fuga,
mientras me sonríe,
y deja que le ponga las esposas.

Es una de las voces más destacadas de la poesía norteamericana contemporánea. Ganadora de varios premios prestigiosos, entre ellos el Premio Pulitzer y el National Book Critics Circle Award. La poesía de Olds es conocida por su estilo libre y personal, accesible y directo, preciso y versátil, con el que aborda temas cotidianos o profundiza en otros como la muerte, la condición humana, el amor, el erotismo y el sexo.
Nació en San Francisco en 1942, aunque creció en Berkeley, California, donde fue criada, según dijo, como una “calvinista del infierno”. Asistió a la Universidad de Stanford y se graduó en la de Columbia en 1972. Tenía treinta y siete años cuando publicó, en 1980, su primer libro de poemas, Satán dice, que la convirtió en una de las figuras centrales de la poesía estadounidense contemporánea. A raíz de aquel éxito fue entregando otros poemarios, siendo, tal vez, los más representativos, Los muertos y los vivos (1984), La celda dorada (1987), El padre (1992), El salto del ciervo (Premio Pulitzer, 2013).
Biografía en español cortesía de Revista Altazor